Aníbal Fernández, Moreno, De Vido, Kicillof, Abal Medina, La
Cámpora. La sensación generalizada de que el principal enemigo de Cristina es
su propio equipo. Si se lo puede llamar equipo.
Una suma de personajes incomunicados entre sí, arrogantes,
prepotentes. Seres que asumieron que todo vale en nombre de la revolución. Que
en el camino a dicha revolución debían cuidar sus espaldas, sus cuellos y por
sobre todo sus bolsillos. Y así, de a poquito y sin planearlo, nació el diario
de cristina.
Cristina está mal asesorada. Por el nivel y la experiencia
de los personajes antes mencionados podemos suponer que el mal asesoramiento no
parte de falta de capacidad sino de intereses distintos al de la presidenta.